"Los hechos que aquí se presentan han sido recopilados en largas conversaciones con antiguos socios, muchos ya fallecidos, de esta querida institución llamada Club Deportivo Chanco. Los relatos de don Pedro Peña Castro (“Peñita”), don Francisco Pérez Águila (“Don Tuco”) y don Heriberto Orellana Gutiérrez han constituido una rica fuente oral que es la base de este intento de construir una historia".
Hace muchos años, donde los jóvenes centraban sus intereses recreacionales en el fútbol, aquel deporte traído por los marinos ingleses que, poco a poco, fue ganando espacios en la juventud chilena. Chanco, entonces, no estaba ajeno a ello. Surgió, entre ellos, la idea de un nombre que identificara a un gran número de personas y que constituyera, por sí solo, un punto de atracción. Alguien de los presentes propuso llamarlo Eugenio Matte, en honor a un importante líder sindical y político de la época, justificándose en la posibilidad de que los trabajadores de las obras que se construían en Chanco se integraran a la naciente institución. Es así como se dio forma al Club Deportivo “Eugenio Matte”, formado por jóvenes chanquinos del sector de la plaza de armas e integrado también por trabajadores afuerinos que en ese momento cumplían labores en nuestra ciudad. Adoptaron para sí el color rojo en sus camisetas, colores que prontamente empezaron a tener éxito en los encuentros que jugaban ante equipos de Pelluhue, Curanipe y otros sectores aledaños.
En el sector norte, mientras tanto, otro grupo de jóvenes daba forma a otro club, esta entidad pasó a denominarse “Halcón”, destacando en sus poleras amarillas la figura de esta ave que surca de vez en cuando los cielos chanquinos.
Pasó el tiempo y el “Eugenio Matte” seguía en su senda triunfal, situación que le llevó a tener un merecido prestigio, recibiendo cada vez más invitaciones para enfrentar a diversas agrupaciones de jóvenes de localidades cercanas que, de igual forma, se sentían atraídos por el juego. Al norte de la ciudad, mientras tanto, los del “Halcón” continuaban sumando más interesados (probablemente en verano) armaban una “pichanga” de fútbol.
Chanco, en aquel tiempo, era más pequeño que hoy día y no tenía mucho donde entretenerse, por lo que el deporte, y especialmente el fútbol, aparecía como una de las pocas soluciones para combatir el tedio y la modorra. Y qué más fácil que jugar a la pelota, en donde lo único que se necesita es el balón y un espacio abierto; los arcos muchas veces eran dos piedras ubicadas a una distancia determinada o quizá, aunando voluntades, se podían construir con palos cortados en el bosque.
Al año siguiente (1941) empezaron los problemas. Las construcciones que se levantaban en Chanco estaban casi terminadas y aquellas personas que trabajaban en ellas volvían a sus hogares dejando al club “Eugenio Matte” sin muchas de sus figuras. Así fue como cada vez se hizo más difícil cumplir con los compromisos adquiridos y, muchas veces, tuvieron que declinar ante invitaciones para jugar fuera de la ciudad, la excusa era siempre la misma, ya no había jugadores como para completar una oncena, menos para pensar que esta sería competitiva. Sin embargo, las invitaciones seguían llegando, es que el “Eugenio Matte” ya era conocido en los alrededores.
Nadie sabe cuándo fue exactamente, pero en algún momento del año 1941, alguien invitó a un integrante del “Halcón” para completar el plantel que se disponía a cumplir con una de las tantas invitaciones que se recibían. Más adelante ocurrió lo mismo y ya fueron varios los jóvenes halcones que eran invitados por los del “Matte”, haciéndose esta práctica cada vez más habitual, permitiendo así que los lazos de amistad fueran creciendo entre los integrantes de los dos clubes. Finalmente, y, para constituir una verdadera alianza entre ambas agrupaciones, se realizó una reunión en casa de Don Gerardo Castro. En dicha reunión se resolvió dar forma a un nuevo club deportivo, el que llevaría por nombre CHANCO, como el lugar en donde nació. Don Gerardo Castro, el dueño de casa, fue electo presidente y así, de la unión de dos grupos de jóvenes nació nuestro Club.
Años después se adoptarían los colores definitivos “polera verde, que representa el bosque que es el que nos da la vida, y pantalón blanco, que representa la pureza de nuestro accionar”, según las palabras de don Alejandro Peña Castro (Q.E.P.D.), gran socio y dirigente de nuestro Club, cuando este participaba en la Asociación de Fútbol de Cauquenes.
A 79 AÑOS DE ESTE ACONTECIMIENTO, LA DIRECTIVA, SALUDAN A TODAS LAS FAMILIAS QUE ALGUNA VEZ FUERON PARTE DE ESTE LINDO E HISTÓRICO CLUB Y LES INVITA A VOLVER A CREER EN EL CLUB Y EN SU FUTURO.
Club Deportivo Chanco
21/12/2020
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